Si estás empezando a leer esto, te quiero hacer saber que es un consejo que una chica de casi quince años, en una tarde fría y lluviosa. Simplemente.
Y bien, quiero que te pares a pensar en esa persona a la que quieres o con la que estás, que seguramente no sea la correcta ya que solo lo es el diez por ciento de los casos, muy poco, pero no por fastidiar ni mucho menos, solo por hacerte reflexionar.
Esa persona es aquella tan especial con la que soñabas desde hace tiempo o con la que pensabas que podías tener algo, no la conocías antes, pero desde que la conocistes sueñas y te despiertas con una imagen de su rostro. Escuchas su nombre en frases que tus familiares te dicen, pero en realidad solo son palabras que se le asemejan. Cuando estás con ella su sonrisa es lo más perfecto del mundo y su mirada te hace no hacértelo pensar dos veces, lo es. Todo, su forma de ser, su pelo, su risa.. todo es perfecto.
Cuando hablas con esa persona el tiempo no existe, bueno sí, hasta que tu madre te dice ¿vienes a cenar? o ¿cuanto te queda? o quizá ¿has estudiado? Y tú te preguntas, ¿no acababo hace un rato de decirla 'hola'?
Simplemente quiero que sepas que esa persona con la que deberías de estar no debe ser otra que aquella la cual no sale de tus sueños, la cual ves por la calle o por cualquier lado y no puedes no ser cantoso o cantosa mirándole o mirándola, porque el amor sale solo, porque de verdad la quieres, y eso se nota. La persona que debe estar a tu lado, tiene que ser compatible con tu corazón.
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